Tras un mes de octubre de desenfreno, la tendencia en los precios de la energía ha vuelto a estar en boca de la mayoría de españoles. Muchos están preocupados por el futuro, otros no entienden qué está pasando. En un intento de explicar el funcionamiento del mercado de la energía, desde Plena Energía, vamos a aportar nuestro granito de arena y vamos a explicar el funcionamiento de una de las instituciones claves que determinan su precio: OMIP.
En entradas anteriores, ya hablamos de OMIE y su funcionamiento. Sin embargo, no hablamos de OMIP, que podría ser considerada como un “primo”. Como veremos, ambas tienen similitudes, aunque se dedican a tareas totalmente diferentes. ¿Sabes que se puede predecir el precio de la energía a futuro? ¿Te gustaría saber cómo se hace esto? Sigue leyendo y averigua todas las claves. ¡Adelante!
En la península ibérica, tenemos una gran entidad que gestiona los mercados de la electricidad de España y Portugal: MIBEL (Mercado Ibérico de la Electricidad). Gracias a ella, cualquier persona física o jurídica puede comprar energía diariamente o a futuro en un mercado en régimen de libre competencia.
De MIBEL, salen dos reguladores de mercado diferentes: OMIE y OMIP. El primero de ellos, se encarga de vigilar el correcto funcionamiento de las subastas diarias del mercado eléctrico. El segundo, también se encarga de lo mismo, pero con una diferencia: OMIP se encarga de la gestión del mercado a futuro o a plazos de la energía.
OMIP es un acrónimo del Operador del Mercado Ibérico – Polo Portugués. Su fundación fue en el año 2003 como consecuencia de la liberalización e integración del mercado eléctrico de la península ibérica. No obstante, a consecuencia de diferencias políticas internas y entre ambos países, su funcionamiento no dio el pistoletazo de salida hasta 2006.
Recordando términos ya explicados en entradas anteriores, el mercado mayorista de la electricidad se basa en el intercambio de energía entre diferentes agentes con el objetivo de abastecer al cliente final. Partiendo de esta premisa, debemos distinguir entre mercado diario (OMIE) y mercado a futuros, protagonista principal de esta entrada y donde OMIP opera.
Son varias las funciones y objetivos que tiene OMIP. Sin embargo, nosotros, nos vamos a fijar en la más importante y por la que muchos usuarios preguntan: la previsión de precios de la energía a futuros. Esta función es imprescindible, pues da una idea al consumidor o cualquier agente de mercado de cuál puede ser la tendencia del mercado a corto-medio plazo.
Asimismo, OMIP desempeña otras funciones como:
Si has llegado hasta aquí, ya habrás podido observar algunas diferencias notables entre ambos operadores de mercado. La más clara es natural: OMIE es la vertiente española que se encarga de regular el mercado diario de la electricidad y, en cambio, OMIP es la variante portuguesa que garantiza el correcto funcionamiento del mercado a futuros de la energía.
Ambas dependen de MIBEL, pero sus funciones son totalmente opuestas en la práctica. Por otro lado, OMIP se encarga de dar una cobertura de riesgos en el mercado. Es decir, ante un sector caracterizado por su volatilidad, se nos ofrece una seguridad y confianza ante lo que puede pasar en un futuro. En cambio, OMIE nos indica, entre otras cosas, el precio diario por el que va a pagar la energía.
Una cosa debe quedar clara, OMIP no sabe nunca el precio exacto al que se va a pagar. Únicamente, hace una estimación de acuerdo a una serie de parámetros que más adelante indicaremos. Como vemos en la siguiente imagen, se hace una estimación de precios a diferentes espacios temporales: semanas, meses, trimestres y años.
Si vamos a cualquier filtro, podremos ver cómo ha ido evolucionando la curva de previsión de los precios. Esto, la mayoría de veces, depende del precio diario de la energía, pues este refleja la situación actual del mercado eléctrico. Los precios de OMIP no son del todo exactos siempre, pueden variar mínimamente. No obstante, estas pequeñas variaciones, deben ser consideradas como algo normal y positivo.
Al igual que en el mercado diario, los precios del mercado a futuros en OMIP también están marcados por el punto de casación entre las ofertas y demandas de generadores y compradores. Sin embargo, para calcular esa previsión entran en juego una serie de factores externos que hay que tener en cuenta:
Las operaciones en los mercados a futuros pueden realizarse a través de diferentes maneras: Mediante contratos bilaterales o mediante mercados no organizados y organizados. Nosotros nos vamos a fijar en el último de ellos, pues es del que forma parte OMIP. Así pues, el mercado organizado está representado por una serie de miembros que garantizan su funcionamiento. Encontramos los siguientes:
Hoy, nos hemos adentrado en un tema poco conocido para los iniciados en el sector energético, el mercado a futuros. OMIP ha sido la gran estrella de esta entrada, pues es la encargada de que todo funcione de forma correcta. Tiene similitudes con OMIE en cuanto a su funcionamiento, pero su finalidad es totalmente otra.
Como hemos podido ver, OMIP se encarga de hacer una previsión de los precios de la energía a corto-medio plazo. Además, es la responsable de vigilar todas las operaciones a futuro que se hacen de la energía ofertada. A priori, puede haber parecido un tema denso y poco atractivo. Sin embargo, estamos hablando de una institución que de no existir, nada tendría sentido en este sector.