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Este mes de julio ha vuelto a reducirse el Impuesto del Valor Añadido (IVA) de la luz al 10%. Tras cuatro meses con este impuesto al 21%, todas las facturas con, al menos, un día del mes de julio serán emitidas con la aplicación del 10% de IVA.
Con el verano, llega el calor, mayor consumo energético y con ello una subida de precios como la experimentada en junio. El precio de la electricidad aumentó casi un 85% respecto al precio medio del “pool” en mayo.
El principal motivo del cambio del IVA es el artículo 21 del RD 8/2023 publicado el 27 de diciembre del pasado año. Modificó el paquete de medidas creado para hacer frente a la crisis energética derivada del estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania que dejó precios elevadísimos en el mercado energético.
En 2023, se mantuvo el IVA de la factura de la luz al 5% durante todo el año. La entrada de 2024 trajo el 10% de IVA sujeto a una condición: se aplicará el 10% de IVA siempre y cuando el precio medio mensual supere los 45€/MWh. Mientras tanto, se facturará con este impuesto al 21%.
La reducción de julio se debe al precio medio del mes de junio. La media de OMIE se situó en 56€/MWh lo que activó la reducción del IVA de la luz automáticamente.
Esta regla de reducción del IVA está vigente, de momento, hasta el próximo 31 de diciembre. Todavía se desconoce si mantendrán algunas de estas medidas de protección frente a posibles precios desorbitados en el mercado energético.
La reducción del IVA de la luz al 10% se aplicará, de momento, únicamente durante el mes de julio, a la espera de ver cómo evoluciona el mercado eléctrico.
Todo apunta que el IVA de las facturas se mantendrá reducido al 10%, al menos, durante todo el verano, ya que las previsiones apuntan a superar los 45€/MWh tanto en julio como en agosto. Por el momento, durante los 12 primeros días del mes, julio registra un precio medio de casi 60€/MWh.
Los mercados a futuros sitúan entre los 76 y los 86 €/MWh los meses de julio a diciembre, según datos de OMIP. Si estas previsiones se cumplen, la reducción del 10% de IVA en la factura de la luz se mantendría durante todo el año, al situarse por encima de los 45€/MWh de referencia.
La rebaja del IVA de la luz afecta a todos los consumidores titulares de contratos de suministro de electricidad con potencia contratada igual o inferior a 10kw. Independientemente de si están en la modalidad de contratación, fija o indexada.
La reducción del IVA impactará a la mayoría de los 28 millones de pequeños consumidores en España, incluyendo a los 19,6 millones con tarifa libre y a los 8,5 millones con tarifa regulada, también conocida como Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC).
Por tanto, quedan fuera de esta rebaja del Impuesto del Valor Añadido los suministros de media y alta tensión (3.0 y 6.1TD). Por lo que no afecta a medianas y grandes empresas.
En paralelo, además del incremento del IVA de la factura de luz, este mes de julio ha vuelto al valor habitual del Impuesto Eléctrico (IEE) al 5,11%, después de llevar 3 años reducido.
El primer trimestre de 2024 estuvo al 2,5%, del 1 de abril al 1 de julio subió al 3’8% ( 2º trimestre) y en 2023 se mantuvo reducido al 0,5%.
El IEE es un tributo que grava el consumo de electricidad de un punto de suministro, se aplica a todos los consumidores independientemente de su consumo o tarifa.
Otro de los impuestos que recupera su valor habitual en este mes de julio, es el Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica (IVPEE) que retorna al 7%.
La rebaja del IVA de la luz no afectará demasiado al precio final de la factura. Aunque la bajada está ideada para darle un respiro al consumidor, el encarecimiento de las energías por el crecimiento de la demanda en verano y el aumento del Impuesto Eléctrico, hará que los consumidores no lo noten demasiado.
Esta variación del porcentaje del IVA de las facturas puede suponer, según la OCU, una rebaja en la factura de la electricidad de un hogar medio de 5,44 euros al mes.
Tras unos meses batiendo récords de generación renovable y precios bajos, los mercados a futuro apuntan a un encarecimiento de la electricidad, al menos en los próximos meses veraniegos.
Las subidas de temperatura, el aumento de la demanda y el pequeño descenso de las renovables son los principales motivos. También influyen la subida del precio del gas y de los derechos de emisiones de CO2.
Estos meses habrá que prestar atención al precio medio mensual para ver si supera o no el umbral marcado por el Gobierno de 45€MWh y el IVA de la factura de la luz se mantiene al 10% o vuelve al 21%.
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