Nunca está de más recordar ciertos conceptos para refrescar la memoria. Por muy claros que parezcan, siempre va a haber interesados en el sector energético y eléctrico que necesiten explicaciones fáciles y sencillas. Hace unos meses, bajo nuestra labor didáctica, ya analizamos con detalle la factura de la luz. Asimismo, hoy vamos a conocer la diferencia entre potencia y energía.
Estamos hablando de términos muy presentes dentro del sector, por lo que es imprescindible conocerlos al detalle. Muchas veces los hemos oído, pero ¿Sabemos realmente la diferencia entre potencia y energía? ¿Qué ejemplos podemos encontrar en el día a día? Conoce estos y muchos más secretos en las siguientes preguntas. ¡Empezamos ya!
Sin preámbulos, para conocer mejor la diferencia entre potencia y energía veamos la definición para cada concepto. La energía podemos definirla como la capacidad que se tiene para cambiar el estado de algo. Hay varios tipos de energía como la cinética o la térmica. Sin embargo, en esta entrada, nos centraremos en la energía eléctrica, aquella que desprende corriente a cualquier aparato o sistema electrónico.
La energía eléctrica se entiende como un intermediario entre un recurso natural y una finalidad (encender la luz, arrancar un electrodoméstico, etc.). Es decir, necesitaremos de viento, carbón o gas para poder conseguir cualquiera de las acciones anteriores. En la factura de luz, la diferencia entre potencia y energía vendrá dada por el tiempo.
La potencia se origina de la diferencia que hay entre la energía que se necesita para llevar a cabo un proceso y el tiempo que requiere. En la factura de la luz, esta suele medirse en kilovatios (kW) y, en definitiva, explica la cantidad de energía que se necesita para cubrir la demanda generada por una casa, industria o negocio.
Visualmente, podemos ver la diferencia entre potencia y energía con truco fácil. Las siglas que vemos en la factura de la luz son importantes. Mientras que para el primer concepto se usan las letras kW, para ver la energía consumida se utiliza kWh. Partiendo de la base que la energía se mide en julios (J), atento a las siguientes fórmulas para medir ambos términos:
Por si no te ha quedado claro del todo, vamos a explicar la diferencia entre potencia y energía con ejemplos más ilustrativos. Para empezar, todos los aparatos eléctricos, especifican su consumo en términos de potencia en alguna de sus partes. La razón es sencilla, el tiempo: dependiendo de lo mucho o poco que las uses, gastarás más o menos energía.
Pongamos el caso de una bombilla. Su potencia vendrá determinada por la energía que ha consumido en un tiempo dado, por ejemplo 100W. Entendido este paso, para calcular la energía que se ha consumido durante un tiempo, habría que multiplicar esos 100W por el tiempo que esté encendido (2 horas p. ej). Por tanto, diríamos que esa bombilla ha consumido 200kWh.
Cuando firmamos y damos de alta un punto de suministro eléctrico, la potencia contratada será un punto clave que debes ajustar lo mejor posible. Mucha gente no lo sabe, pero tener una buena adaptación podrá provocarte un ahorro ostensible cada mes en la factura de la luz. Para saber cuál es la que debes contratar sigue estos pasos:
Problema común: Qué ocurre si me paso de la potencia contratada. Si tu suministro maneja grandes cantidades de energía, puedes recibir una penalización económica en tu factura por estos excesos. Puedes conocer la cuantía de estas sanciones en esta entrada de blog que realizamos hace unas semanas.
Por norma general, todas las comercializadoras hacen la facturación por energía consumida de forma mensual. Si coges una factura de luz cualquiera, fíjate bien, esta se expresa por la cantidad de kWh que se han utilizado en un espacio de tiempo determinado, en este caso, un mes, 30 días. Este es un término variable, por lo que todos los meses pagaremos un importe diferente.
Con el último cambio de tarifas producido el 1 de junio de 2021, se ha querido dar un vuelco a la forma de consumir luz por parte de los consumidores. La facturación por energía consumida ahora se divide en tres periodos diferentes (valle, llano y punta) en el que cada uno tendrá un precio diferente en función de la hora que sea.
Otra diferencia entre potencia y energía viene por el precio al que lo paga el consumidor. Por si no lo sabías, la potencia es un término fijo en la factura de la luz. Es decir, se pagará siempre el mismo importe independientemente de la energía que consumas. Con la energía pasa lo contrario, su precio vendrá dado por el total de electricidad que se haya consumido.
No obstante, otra diferencia en el precio de la potencia y energía puede variar en función de si estás en un contrato fijo o indexado. En el primero de los casos, los precios son impuestos por la comercializadora con la que contratas. Si dispones de una tarifa indexada, los costes de ambos conceptos son determinados por la subasta que se realiza cada día en OMIE.